LA BASILIQUE SAINT-SERNIN
Acerca de
Esta solemne basílica de ladrillo y piedra es uno de los símbolos de Toulouse. Es majestuosa y luminosa. Fue construida entre los siglos XI y XIV en honor a San Saturnino (o Sernin), primer obispo de la ciudad. Es una etapa importante en el Camino Compostelano. Su arquitectura invita al recogimiento y sus amplias proporciones facilitan el deambular de peregrinos que veneran sus numerosas reliquias. Su nave de 21 metros de altura con una bóveda de medio cañón que descansa sobre capiteles primorosamente esculpidos nos lleva hasta el altar mayor con un baldaquín de madera dorada y mármol. En la nave transversal, ricamente decorada, podemos apreciar bellos frescos medievales.
También se puede visitar la cripta donde se venera el relicario esmaltado de la Santa Cruz en forma de sarcófago.